martes, 3 de abril de 2012

Isaias 9



2 El pueblo que andaba en tinieblas vio gran luz; los que moraban en tierra de sombra de muerte, luz resplandeció sobre ellos.
3 Multiplicaste la gente, y aumentaste la alegría. Se alegrarán delante de ti como se alegran en la siega, como se gozan cuando reparten despojos.
4 Porque tú quebraste su pesado yugo, y la vara de su hombro, y el cetro de su opresor, como en el día de Madián.
5 Porque todo calzado que lleva el guerrero en el tumulto de la batalla, y todo manto revolcado en sangre, serán quemados, pasto del fuego.
6 Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz.
7 Lo dilatado de su imperio y la paz no tendrán límite, sobre el trono de David y sobre su reino, disponiéndolo y confirmándolo en juicio y en justicia desde ahora y para siempre. El celo de Jehová de los ejércitos hará esto.

Isaías 9:2-7 (RRV1960)

1 comentario:

  1. ¡Que sería de la humanidad si Jesus no hubiera venido! Que horrible sería todo, que espantosa sería mi vida sin su luz, sin su libertad tan inmensa!!! La descripción de Isaias es perfecta: el es la luz que resplandeció en las tinieblas. Hace unos días platicaba con alguien que empieza a conocer de Jesús y me encantó una frase que dijo: "es como si hubiera estado caminando en una calle oscura y de pronto alguien encendiera todas las lamparas" Jesus es nuestra alegría, admirable, consejero, fuerte uuf no alcanzan las palabras para describirlo solo se que me da mucha alegría y estoy eternamente agradecida porque el vino, murio, se levanto y decidio acercarnos y dejarnos conocerlo :)

    ResponderEliminar