2 Samuel 7 Una casa para El Eterno

Aconteció que cuando ya el rey habitaba en su casa, después que Jehová le había dado reposo de todos sus enemigos en derredor,

² dijo el rey al profeta Natán: Mira ahora, yo habito en casa de cedro, y el arca de Dios está entre cortinas.

³ Y Natán dijo al rey: Anda, y haz todo lo que está en tu corazón, porque Jehová está contigo.

⁴ Aconteció aquella noche, que vino palabra de Jehová a Natán, diciendo:

⁵ Ve y di a mi siervo David: Así ha dicho Jehová: ¿Tú me has de edificar casa en que yo more?

⁶ Ciertamente no he habitado en casas desde el día en que saqué a los hijos de Israel de Egipto hasta hoy, sino que he andado en tienda y en tabernáculo.

⁷ Y en todo cuanto he andado con todos los hijos de Israel, ¿he hablado yo palabra a alguna de las tribus de Israel, a quien haya mandado apacentar a mi pueblo de Israel, diciendo: ¿Por qué no me habéis edificado casa de cedro?

⁸ Ahora, pues, dirás así a mi siervo David: Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Yo te tomé del redil, de detrás de las ovejas, para que fueses príncipe sobre mi pueblo, sobre Israel;

⁹ y he estado contigo en todo cuanto has andado, y delante de ti he destruido a todos tus enemigos, y te he dado nombre grande, como el nombre de los grandes que hay en la tierra.

¹⁰ Además, yo fijaré lugar a mi pueblo Israel y lo plantaré, para que habite en su lugar y nunca más sea removido, ni los inicuos le aflijan más, como al principio,

¹¹ desde el día en que puse jueces sobre mi pueblo Israel; y a ti te daré descanso de todos tus enemigos. Asimismo Jehová te hace saber que él te hará casa.

¹² Y cuando tus días sean cumplidos, y duermas con tus padres, yo levantaré después de ti a uno de tu linaje, el cual procederá de tus entrañas, y afirmaré su reino.

¹³ El edificará casa a mi nombre, y yo afirmaré para siempre el trono de su reino.

2 Samuel 7:1-13 (RVR1960)

2 Samuel 7:1-13 (La Voz)

2 Samuel 7:1-13 (NVI)

Sin recibir lo que merecemos (Parte 2)

Lectura bíblica1: Mateo 5:23-26

 

Si tu... ofrecerás sacrificio a Dios y de pronto recuerdas que alguien tienen algo contra ti, ve y reconcíliate con esa persona. Mateo 5:23-24

 

"ALLISON DIJO que estaba arrepentida de hablar mal de mi a mis espaldas", Brooke replico. "Pero ella se rio como si pensara que todo el asunto era una estupidez. Y después esa tarde hizo lo mismo otra vez. Que se supone que debo hacer con eso?

 

Vamos a aclarar. Si tu quieres entender lo que es el perdón, también necesitas entender lo que el perdón no es. Mira estos conceptos:

 

El perdón no es condicional o merecido. No puedes decir, "Si limpias tu vida te perdono." Si guardas resentimiento no estas mostrando perdón genuino.

 

El perdón no es un sentimiento. Algunas veces no deseas perdonar, pero cuando tu perdonas en fe sabiendo que haz hecho lo que Dios quiere que hagas seguramente te sentirás mejor después de haberlo hecho. Pero el perdón empieza con un acto de voluntad. El perdón no pretende que algo no sucedió. Algunas personas van por la vida pretendiendo que nunca hubo un problema. Si así es como tratas con una situación dolorosa, no te sorprendas si ocurre otra vez.

 

El perdón no es pretender que lo malo es bueno. Perdonar a alguien no significa que pienses que lo que paso esta bien. Puedes perdonar a tu ofensor y aun así desafiar a esa persona a dejar de lastimarte.

 

El perdón no es decir, "Olvidémoslo." Enfréntalo: Tu no lo olvidas. En lugar de eso, el dolor se convierte en resentimiento. Olvidar no se convierte en perdonar. Funciona de forma contraria: Perdonar se convierte en olvidar.

 

El perdón no borra las consecuencias. Alguien que hace algo malo tiene que enfrentar la perdida de su reputación, perdidas financieras, perdida del sueño o sin fin de consecuencias. La persona que hace lo malo tiene una responsabilidad, una responsabilidad legal y una responsabilidad delante de Dios. Si tu perdonas a alguien, eso significa que has tratado con ello de una forma personal. pero esa persona aun tiene que responder a Dios y las autoridades humanas.

 

Puedes temer que perdonar y buscar perdón te hagan débil. Pero ignorar una herida es la salida débil. Tratar de sanar una relación a través del perdón es una señal real de la fortaleza de tu carácter.

 

Reflexiona: En que forma has malentendido el perdón?

 

Ora: Háblale a Dios acerca de alguien a quien necesitas perdonar y no has perdonado porque has malentendido lo que el perdón es y no es.

Sin recibir lo que merecemos

Lectura Bíblica: Salmo 103:8-14 

El señor no nos ha castigado por todos nuestros pecados, no ha tratado con nosotros como lo merecemos. Salmo 103:10 

La primera mitad para entender lo que es el perdón es saber lo que el perdón no es; la otra mitad es saber exactamente lo que si es. Mira estas definiciones, al menos una de ellas tendrá sentido para ti: 

Perdón significa "borrar, renunciar lo que alguien debe".. "abandonar resentimiento".. "Borrar el acta, liberar de una deuda, cancelar el castigo".. "aceptar personalmente el precio de la reconciliación".. "cesar los reclamos sobre aquel quien nos lastimo y soltar las consecuencias emocionales de esa herida". Perdonar no solo significa decir "te perdono" sino significa que puedes dejar ir todas tus heridas. 

Perdonar es una acción; no es justificación para esperar sentado a que la persona que te ha ofendido diga, "¿Me equivoque; puedes perdonarme?" Tal como Jesús murió por ti cuando aun eras un pecador (Romanos 5:8), perdonar significa que tu tomas el primer paso para sanar la relación. 

Perdonar también significa "renunciar u otorgar". Eso significa que renuncias al derecho de recibir retribución para quedar a mano sin importar lo bien que se siente la venganza. Perdonar significa otorgar misericordia en lugar de imperante justicia. 

Si no te gusta ese enfoque de la vida, considera esto: No seria muy inteligente orar por justicia en tu relación con Dios, porque su justicia te arrasaría por completo. Lo que deseas pedir es su misericordia, eso que te permite ser perdonado a pesar de tu pecado. 

Funciona de la misma forma en las relaciones humanas. El mundo te dice que odies. Dios dice que ames. El mundo te dice tienes derecho a vengarte. Dios dice que perdones.

¿Por que? Porque Dios quiere que perdones de la misma forma en que el te perdona, completa y continuamente. Pablo escribió a los Colosenses, "Dios ha comprado nuestra libertad con su sangre y ha perdonado todos nuestros pecados" (1:14). En Hebreos 10, descubrimos que el perdón de Cristo fue "una sola vez y para siempre" (vrs. 10). Una vez que se ofreció a si mismo como sacrificio por el pecado, "El se sentó en el lugar mas alto de honor a la diestra de Dios" (vrs. 12). 

Dios no te perdona por algo que tu puedes hacer o has hecho sino por quien Cristo es y lo que El ha conseguido para ti a través de la cruz. Ese es tu modelo para perdonar a los demás. Tu no perdonas porque la persona que te lastimo ha cambiado o te ha rogado perdón, sino porque tu como Cristo simplemente estas listo para perdonar.

Reflexiona: ¿Eres una persona que puede perdonar?
Ora: Pide a Cristo que comparta su corazón perdonador contigo hoy.